Frenar la fatalidad en tiempos de crisis: Un país que se moviliza por la vida

Colombia experimenta un aumento en los siniestros viales, afectando especialmente a motociclistas, peatones y mujeres. Este fenómeno se atribuye al crecimiento acelerado del parque automotor, la informalidad y los comportamientos de riesgo. La Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) ha asumido un rol activo, enfocándose en la prevención y el acompañamiento.Cifras y contexto del riesgo:

• Mortalidad relativa de motociclistas disminuyó: Aunque el número de motocicletas en circulación aumentó en 2025 (cerca de 240.000 más que el año anterior), el riesgo relativo de fatalidad por cada moto nueva se redujo un 21%.
  • 2024: 62,6 motociclistas fallecidos por cada 10.000 motos nuevas.
  • 2025: 49,3 fallecidos por cada 10.000.
• Aumento en víctimas fatales: Pese a la disminución del riesgo relativo, entre enero y octubre de 2025, las víctimas fatales crecieron un 5%. Las causas incluyen la explosión del parque motociclista, las brechas en cultura vial, el control territorial insuficiente (especialmente fines de semana) y la baja efectividad en las sanciones (solo 3 de cada 10 comparendos se concretan en multa).

Acciones y respuesta de la ANSV:La ANSV ha implementado una respuesta con enfoque territorial, prevención y acompañamiento, que incluye:

• Control priorizado: Se solicitó priorizar operativos en fines de semana, noches y corredores críticos, donde la evidencia indica que se pierde más vida.
• Presencia nacional: La Agencia llegó a 614 municipios, muchos de ellos rurales, con más de 7.300 acciones técnicas y pedagógicas, sensibilizando a 384.668 personas.
• Fortalecimiento de la planeación: Más de 200 municipios recibieron asistencia para formular Planes Locales de Seguridad Vial.
• Plan Navidad: Se activó un plan enfocado en peatones, motociclistas, mujeres, niños y adultos mayores, con presencia en corredores turísticos y terminales, alertando sobre el periodo más crítico de siniestralidad.

Responsabilidad compartida:La seguridad vial es una causa nacional y una tarea compartida que requiere el compromiso de:

• Autoridades locales actuando con contundencia.
• Conductores conscientes.
• Control efectivo y articulación entre municipios, empresas y organismos de tránsito.
• Una ciudadanía que entienda que cada decisión al volante es una decisión sobre la vida.